«Los que formamos parte de la industria hotelera, una vez más seremos capaces de adaptarnos a la nueva realidad»
«Son varias las palabras que nos pueden venir a la mente a la hora de intentar definir la situación actual de la economía mundial, regional, local y por ende la de la industria turística y en particular la hotelera.
INCERTIDUMBRE. Es la sensación que tengo cuando busco soluciones e intento planificar el futuro, tanto en el momento inmediato como a largo plazo. La gran cantidad de variables que inciden en diferentes resultados, así como el impacto de esta crisis en la sociedad civil y de consumo actual, dificulta el establecimiento y encuentro de la salida, aunque no me cabe duda de que ésta existe. La duración de esta crisis dependerá de las diferentes estrategias y medidas que se adopten en cada uno de los ámbitos, ya sean políticos, económicos o sociales, las cuales marcarán el devenir de esta crisis mundial. Pero mi sentimiento interno es sin duda de incertidumbre.
DESACOMPASAMIENTO. Es bajo mi opinión una de las claves de la situación actual. El desacompasamiento en la situación que cada una de las zonas geográficas se está encontrando en su lucha contra la Pandemia del COVID- 19. Mientras observamos que en el foco inicial de Wuhan comienzan a suavizarse las medidas de contención sociales y, muy lentamente, se comienza a recuperar la cotidianidad, en el resto del planeta no existe un momento de lucha común frente a la situación de crisis. Cada continente y país vive un momento particular de su lucha y una situación sanitaria completamente diferente a la del vecino. La diversidad de políticas, líderes, idiosincrasias, religiones, culturas, prioridades, recursos económicos y sanitarios, provocan esta situación de diferentes realidades en un mundo en el hasta ahora imperaba la globalización. Este desacompasamiento de los países ahonda más si cabe en la incertidumbre, ya que en una industria como la nuestra, tan expuesta y sensible a la confianza y seguridad, y tan dependiente de los movimientos de personas en el ámbito mundial, no nos permite predecir con exactitud cuando volverá a surgir el acompasamiento entre países renaciendo con ello la confianza.
SUPERVIVENCIA. Es el martillo que cada día se va haciendo más presente en la realidad de la economía. A día de hoy y llevando a cabo el ejercicio necesario de pronosticar de la manera más cercana y exacta posible el nuevo ritmo de la economía y de cada una de nuestras empresas, la supervivencia es el objetivo principal, y no sólo conseguirla de manera inmediata, sino desde la nueva realidad a la que nos estamos enfrentando, nueva y desconocida. Una supervivencia que espera ser gestionada a partir de esta nueva era. Ante la incertidumbre de los planteamientos cambiantes del gobierno, los empresarios turísticos miramos al frente intentando escudriñar los nuevos retos que se plantean ante nosotros, teniendo como objetivo fundamental la supervivencia de nuestras empresas.
Y ante estas tres palabras que definen el momento actual ¿Qué estrategia de adaptación a las nuevas realidades estamos abordando desde Panoram Hotel Management?
En Panoram Hotel Management existe una diversidad de activos, propiedades, marcas y localizaciones que nuestro modelo de negocio ha mantenido presentes en diversos frentes y, por supuesto, nos ha permitido contar con un gran número de apoyos y herramientas. Han sido indispensables el soporte en la toma de decisiones y apoyo moral recibido por parte de las franquiciadoras como Accor y Hilton, seguido por las asociaciones empresariales como el Gremi d´Hotels de Barcelona, la AEHM en Madrid y la Asociación Riojana de Hoteles, y sumado al de los nueve propietarios de nuestros establecimientos, que han compartido, guiado, acogido y acompañado en el dramático proceso de cierre de nuestros siete hoteles así como en la demora de las dos nuevas aperturas del Tapestry by Hilton Madrid Atocha y el Hampton by Hilton en Alcobendas, ambas previstas para el mes de abril. No puedo obviar el orgullo de sentirme acompañado en este momento por el gran equipo humano que compone cada uno de los hoteles que Panoram gestiona, un grupo de personas que desde el primer momento tendió su mano para pasar esta crisis juntos. Son las personas las encargadas de hacer esta industria grande y única, y aquellas que hacen que la experiencia hotelera de este país sea inigualable. Por eso, cuando miro hacia adelante, intentando situar aquellos hitos que deberán marcar el tiempo del renacimiento, es cuando realmente me permito creer en el año 2020 como ese punto de referencia para concluir la primera etapa de la recuperación. Efectivamente este año 2020 va a ser atípico. Será el período de tiempo en el cual como personas, sociedad, economía y empresa deberemos adaptarnos a las nuevas realidades de la demanda del mercado y donde sin duda los que formamos parte de la industria hotelera una vez más seremos capaces de adaptarnos a la nueva realidad. Más allá de las adaptaciones físicas y económicas, creo firmemente en el esfuerzo común de cada uno de los actores involucrados en la industria, para que desde esa alianza seamos capaces de generar la confianza e ilusión necesarias para hacer vencer el miedo de nuestros clientes y seamos partes fundamentales de la recuperación. Recuerdo que el 2020 se tomó como referencia hace unos años para establecer una meta temporal para el cambio de diversos aspectos del mundo turístico. Muchos de aquellos planteamientos se vieron truncados por la crisis económica del año 2008 y, sin embargo, este año 2020 definitivamente será finalmente referencia en un cambio aún por descubrir. Seguro que nuestra forma de vivir el turismo cambiará, también la forma de desplazarnos, alojarnos, el ocio cultural, el descanso, etc.…, pero creo que tenemos la oportunidad de poner en práctica iniciativas que quizás antes no valorábamos. Miremos el año 2020 como una oportunidad única de mejora y de seguir adelante.»